Cada vez existen más personas en el mundo que sostienen que los alienígenas nos visitaron en el pasado. La teoría podría alimentarse con miles de ejemplos existentes en el mundo, y uno de ellos podría ser Puma Punku. ¿De qué se trata este sitio? No sólo es un increíble complejo de templos lleno de misterios que desconcierta a los investigadores, sino que además es un lugar donde uno pierde la noción de espacio y tiempo. Está situado cerca de Tiwanaku, en la actual Bolivia, y es una de las ruinas antiguas más increíbles de Sudamérica. Puma Punku (‘La puerta del Puma’ en idioma quechua), como lo llamaban los incas, cuenta con llamativos cortes de precisión, ingeniería milimétrica y evidencia de alto nivel de geometría y matemática. Es un tesoro para cualquier persona que tenga conocimiento de Matemáticas, Geología, Ingeniería y Astronomía, entre otras ramas. Las encuestas realizadas con radar de penetración en el suelo, magnetometría, conductividad eléctrica inducida y susceptibilidad magnética revelan la presencia de numerosas estructuras artificiales como cimientos de edificios y compuestos, conductos de agua, características de piscina, revestimientos, terrazas, complejos residenciales y pavimentos de grava generalizados, los cuales ahora se encuentran enterrados y escondidos bajo la superficie del suelo moderno. Al margen de la precisión de la elaboración, otro misterio resulta la movilización, considerando que nadie entiende cómo la humanidad antigua logró transportar estos enormes bloques de piedra desde las canteras entre 10 a 100 kilómetros. No es el primer caso en que antiguas civilizaciones habrían transportado enormes bloques de piedra desde las canteras a través de grandes distancias. ¿Y cómo pudieron realizar este tipo de cortes de precisión y cómo encastraron los bloques de una manera tan perfecta? Los ingenieros y constructores de todo el mundo de hoy no pueden responder ni replicar estos logros hechos por la humanidad antigua hace miles de años. Se estima que los constructores usaron cuerdas de piel de llama, rampas y planos inclinados para mover estos increíbles bloques al lugar de confección. Pero esta explicación no es ampliamente aceptada en la actualidad, teniendo en cuenta que posiblemente se necesiten más que cuerdas de piel de llama y rampas para mover piedras de bloques que pesan más de 100 toneladas métricas. Entre los bloques de piedra más grandes encontrados en Puma Punku podemos encontrar uno con las siguientes características: 7.81 metros de largo, 5.17 metros de ancho, promedios de 1.07 metros de espesor y se estima que pesa alrededor de 131 toneladas métricas. El segundo bloque de piedra más grande encontrado dentro del Puma Punku tiene 7.90 metros de largo, 2.50 metros de ancho y un promedio de 1.86 metros de espesor. Su peso se estimó en 85.21 toneladas métricas. ¿Es posible que los humanos tuvieran herramientas para fabricarlo? O será obra de seres de otros mundos que, arribados a la Tierra, utilizaron esos elementos y enseñaron a usarlos a los hombres, los cuales estarían representados en aquellos grandes monolitos que existen en Tiwanaku? Aún cuando muchos investigadores atribuyen el origen de Puma Punku a una antigua civilización anterior a los Incas - porque cuando estos últimos expandieron su Imperio, Tiwanaku ya era una ciudad abandonada - existen quienes aseveran que la perfección de las líneas y trazos lo relacionan con civilizaciones extraterrestres. El misterio de Puma Punku es tan grande que despierta interés en diferentes países del mundo. Tal es así que hace algunos meses Finlandia se interiorizó en el tema y ofreció ayuda para apoyar las investigaciones arqueológicas en las ruinas. Según trascendió, son varios los países de Europa que desean sumarse a la investigación que devele el misterio sobre esta enigmática construcción.