martes, 15 de octubre de 2024
KAJPAMUILITI: El misterioso guardián de los bosques
Muchos son los seres que habitan el Amazonas y utilizan sus poderes para protegerlo de la destrucción del hombre. Los conocemos por el zumbido del aire, por las inexplicables sombras o extraños ruidos; los espíritus amazónicos viven en las historias de los pueblos, en los orígenes de la vida y en los relatos de los ancianos que heredan su sabiduría a las nuevas generaciones. Uno de ellos es el Kajpamuiliti, quien habita los universos mágicos de los bosques amazónicos siendo el guardián eterno del ciclo de vida de la naturaleza y que ha existido desde el inicio de todos los tiempos. Protector de los piros, habitantes nativos de Madre de Dios y Ucayali, el kajpamuiliti es un pequeño hombre regordete de grandes orejas puntiagudas y amenazantes colmillos, cuya única vestimenta generalmente es un tocado de plumas sobre la cabeza, del cual se dice que tiene la costumbre esperar al lado del camino a algún viajero que invade el territorio sagrado de los piros para aniquilarlo. Si se encuentran con uno le formulará la pregunta “¿a qué familia perteneces?” y la respuesta debe ser la correcta: Koshichiniri, que es el nombre de un pájaro de la selva y que también es la familia a la que pertenece este duende de forma tan peculiar. Entonces los recibe afablemente porque son sus compañeros, les obsequia con frutas silvestres en abundancia, les dirige hacia el término de sus viajes y les garantiza su apoyo en el trayecto. Pero si le contestan que pertenecen a alguna de las demás familias rivales, como son los manchiniri, los koshupati, los gimeniri, los sochichi, los poliriniri o los Kuirikuiri, este ser demoniaco partirá en dos el cuerpo del caminante. La única forma de escapar de su furia antes de que pueda acercarse es desnudándose inmediatamente frente al duende, quien se vuelve al otro lado para no ver los cuerpos desnudos, ya que a pesar que también anda de la misma manera, ya que es muy pudoroso. Su única misión es amparar y defender a sus compañeros los Koshichiniri, y el desaparecer a las demás familias para que solamente se quede la suya. Cabe precisar que el kajpamuiliti es temido hasta por otro ser mágico, el espíritu tutelar del chuchuhuasi. Este pequeño hombre de aspecto desagradable vive en la raíz del afrodisíaco y no está preparado para encontrarse con humanos. Si se topa con uno, lo insultará y empujará hasta cansarse y convertirse en una hoja seca. Cada planta o árbol, la tierra y el viento de la Amazonía les han pertenecido desde siempre a los espíritus que la habitan, y esto lo saben los piros. Es por ello que, al cazar y pescar, los nativos piden un permiso especial a los seres que la cuidan a través de rituales, incluso para usar la arcilla roja que se utiliza para moldear ollas o recipientes, deben pedirle autorización antes de su extracción, sino quieren ser víctimas de su ira.