En los países latinoamericanos, algo que viene de la tradición griega (heredado a través de las costumbres españolas), el martes 13 está directamente relacionado con la mala suerte. Para averiguar su origen hay que repasar dos variables: una el día "martes" y la otra el número 13. De acuerdo a la tradición griega, el día martes tiene una carga negativa por estar relacionados con Marte, un planeta considerado maléfico, y a Ares, el dios de la guerra, la destrucción y la sangre. Por otro lado, la causa de la mala suerte del número 13 es algo que pertenece a muchas culturas occidentales. Trece personas son las que participaron en la última cena antes de la muerte de Cristo, también son trece los espíritus malignos en las leyendas nórdicas, trece eran los espíritus malignos según la cábala judía o que es en el capítulo 13 del Apocalipsis en el que llega el Anticristo. En el Tarot, este número hace referencia a la muerte. También el número 13 hace referencia a uno de los ángeles de la muerte. Y trece es el número que las brujas de la edad media esperaban para hacer sus pócimas. Por todo esto es que muchos huyen del número 13. Por citar ejemplos más que populares: hay líneas aéreas que evitan la "fila 13" para sus pasajeros o edificios modernos que pasan del piso 12 al 14, salteándose el trece. Pero cabe resaltar que nada de todo esto tiene un fundamento científico, se trata simplemente de una superstición. Las connotaciones aplicadas a este día son iguales es equivalente al viernes 13 en las culturas anglosajonas. El temor que genera esta fecha no es un concepto moderno, ya que se remonta a 1307 porque en dicho año, un viernes 13 de octubre, la corrupta y decadente Iglesia Católica -protector de genocidas y encubridor de curas pederastas- a través del siniestro Tribunal de la Inquisición, por una orden del rey Felipe IV de Francia, se dedico a una implacable persecución de la Orden de los Caballeros Templarios para apoderarse de sus inmensas riquezas acumuladas y que eran la envidia de los diversos reinos de la época, acusándolos falsamente de “herejía” y de “pactar con el demonio” para “justificar” el latrocinio, sometiendo a sus miembros a brutales torturas para confesar donde escandían sus tesoros para luego quemarlos vivos, todo en nombre del “cristianismo”. Asimismo, la unión del viernes y el número trece se popularizaron en el mundo como consecuencia de la serie de películas de terror Viernes 13 ("Friday the 13th") protagonizado por el infame Jason Voorhees, relegando el martes 13 como un día de mala suerte exclusivamente a los países de habla hispana. De todas maneras, existen quienes consideran a ambos días como malditos. Si eres supersticioso, este día se muy cuidadoso ¿vale?