TIEMPOS DEL MUNDO

martes, 7 de enero de 2020

CONTACTO EN AREQUIPA: Extraños avistamientos de OVNIS en el Sabancaya

Como sabéis, el Perú es parte del denominado “Cinturón de Fuego del Pacífico”, una de las zonas de convergencia y subducción de placas tectónicas, más importantes del mundo, con una intensa actividad sísmica y volcánica. Por ello, no es de extrañar que este albergue 8 volcanes activos y 6 potencialmente activos, los cuales brindan ciertas particularidades que los diferencian de otros volcanes. Uno de ellos es el Sabancaya – de 5057msnm. - que se ubica en Arequipa, al sur del Perú. Forma parte de un complejo volcánico que incluye otros dos volcanes: el Ampato y el Hualca Hualca. El nombre Sabancaya significa "lengua de fuego" en quechua. Este macizo viene siendo monitoreado actualmente las 24 horas del día por el Observatorio vulcanológico del INGEMMET (OVI) y Observatorio Vulcanológico del Sur (OVS) del Instituto Geofísico del Perú (IGP). Sabancaya ha sido un volcán muy activo en los tiempos históricos y varios relatos atestiguan su actividad eruptiva así como “extrañas luces que parecieran haber salido de su interior” en los años 1460, 1752 y 1784 d. C. Por ejemplo, en la obra de Ventura Travada y Córdoba, titulada "El suelo de Arequipa convertido en cielo", quien fuera cura de las comarcas de Salamanca (valle del río Maran) y Pocsi en Arequipa, se relata lo siguiente a raíz de uno de sus viajes en 1750 por la zona del Ampato-Sabancaya: "..allá el volcán esta perennemente ardiendo de día y de noche dejando ver curiosos fenómenos que son obra del Diablo y que no hay noticia de haber hecho estrago alguno el tiempo de la cristiandad aunque tampoco le faltan señas de haber erupcionado sus crudezas en inmemorables tiempos..." Existen otros relatos históricos del año de 1784, un 11 de julio, durante el periodo de actividad sísmica posterior al gran terremoto del 13 de mayo de ese año y que destruyó la ciudad de Arequipa, se menciona que en el área de Ampato-Sabancaya, el volcán no solo humea y bosteza fuego, sino que también “expulsa luces brillantes en todas direcciones, que increíblemente no tardan en regresar al interior del volcán” por lo que se presume que sean de origen desconocido (¿alienigena?) Luego de más de 200 años de inactividad, las primeras señales de reactivación ocurrieron en 1981, siendo advertidos por los habitantes de Cajamarcana-Huacachiguero situado al pie del volcán, quienes observaron salir del cráter unos objetos al parecer “metálicos” ya que brillaban con la luz del Sol, que se perdieron en el cielo. En 1986 los satélites detectaron un aumento en la emisión térmica en julio de ese año y la intensa actividad se reanudó en diciembre con una intensa actividad fumarólica en el cráter del volcán. Las fumarolas se elevaron entre 500 y 1000 metros de altitud con respecto a la cumbre del volcán, haciéndose visible a varias decenas de kilómetros a la redonda, lo que suscito la inquietud de los pobladores de Chivay, Cabana Conde, Huanca, Lluta, entre otros. Esta actividad disminuyo progresivamente en los primeros meses de 1987, pero volvió con fuerza en agosto de ese año. Las fumarolas eran cada vez más abundantes, con intervalos de 20 a 30 segundos y a veces de 1 minuto, mientras los colores variaban del blanco al gris claro y amarillento. Desde la década de los 90 hasta el día de hoy la actividad del volcán ha ido en constante aumento, llegando a matar al ganado en varias ocasiones, obligando a la evacuación de los poblados circundantes. Lo que mas ha llamado la atención es que esos gases venenosos al parecer no afectan a aquellos seres que habitan en su interior, ya que aparte de sus naves saliendo y entrando del cráter humeante - como puede verse en la imagen que ilustra nuestra nota - también se han detectado humanoides que visten trajes ceñidos al cuerpo de color gris, en sus alrededores, quienes al ser descubiertos, huyen velozmente desapareciendo en las entrañas del volcán. No es el único lugar donde ocurren estos avistamientos, ya que también han sido vistos en otros volcanes como el Ubinas (en Moquegua) e incluso en el Misti, que custodia Arequipa, lo que ha llevado a los teóricos de los antiguos astronautas a preguntarse ¿Qué extraña relación existe entre los extraterrestres y las erupciones volcánicas? Hay quienes aseguran que la presencia de OVNIS en este tipo de situaciones tiene que ver con que “ellos siempre quieren estar al tanto de lo que está pasando. Cuando ocurren tsunamis, terremotos o erupciones volcánicas n el mundo aparecen las naves alienígenas y hemos visto como se fotografían o se graban” recuerdan. “Es sabido que en todas las catástrofes alrededor del mundo es un fenómeno bastante común los avistamientos. Ellos lo hacen para monitorear si van a haber daños ya que ellos están preocupados de lo que puede pasarnos” afirman estos expertos ¿Que secretos se ocultan en el interior de los volcanes? ¿Existirán bases extraterrestres o son la puerta de entrada al centro de la Tierra? Por lo visto, aun hay mucho que investigar.