TIEMPOS DEL MUNDO

martes, 4 de diciembre de 2018

EL ESCARABAJO EGIPCIO: La suerte siempre estará de tu lado

Se trata de uno de los amuletos más conocidos de la historia desde que en el Antiguo Egipto se popularizara su divinidad. En efecto, paredes, joyas y numerosos objetos de valor tenían su representación dibujada para ofrecer protección contra todo tipo de enfermedades, e incluso la muerte. Si en vida proporcionaba protección contra el mal, visible o invisible, dando diariamente fuerza y poder. Al morir, quien lo portaba adquiría la posibilidad de resucitar y poder alcanzar la vida eterna. Pero, ¿cómo una criatura tan pequeña puede llevar tanta historia dentro de su cuerpo? Los egipcios relacionaron su poder con el dios Khepri. Dios del Sol y símbolo de la vida eterna, era representado como un hombre con cabeza de escarabajo. La mitología cuenta que Khepri se creaba a sí mismo cada mañana, renacía como el Sol y de ahí su unión a la vida eterna. De ahí que el pueblo hablara del insecto como "el Gran Dios", el Ra, el creador de todo el universo. Uno de los dioses que dieron lugar a la mitología, de nuevo símbolo de la luz del sol, de la vida y de la muerte. Se convirtió, a su vez, en el Dios oficial de los faraones, aunque su cabeza no era de escarabajo sino de halcón. Incluso en el proceso de momificación, el escarabajo encarnó un papel principal. En toda esa parafernalia egipcia que llevaba al fallecido a una nueva vida este insecto tenía mucho que decir, ya que generalmente se le colocaba en el pecho, reemplazando al corazón porque creían que podría proteger al difunto ante el Juicio de Osiris para que el muerto alcanzara la vida eterna. No es de extrañar por ello que en la parte de granito del sarcófago que representaba el corazón, se tallaban varios de ellos como símbolo de la resurrección. Cabe estacar que en el antiguo Egipto se fabricaron miles de amuletos con forma de escarabajos de diferentes colores, porque se creía que cada uno tenía su propio poder, pero generalmente se los veía más del color verde y de turquesa, el color del nacimiento. Cuando se lo representaba en color blanco el escarabajo estaba relacionado a la muerte, por algún fallecido o soldado caído, mientras que si era de color negro representaba a la tierra fértil, el que da la vida. Con el paso del tiempo su función se ha ido desdibujando hasta acabar siendo un amuleto y objeto de colección. Pero no es de extrañar que la cultura popular, a día de hoy, lo vea como un símbolo de buena suerte. Lo demostraron sus reyes, fue adoptado por todas las clases sociales de la época y se le consideró un Dios. ¿Qué más quieres? Si tienes una de estas piezas en tu poder y no sabías qué hacer con ella, guárdala y llévala siempre contigo. Ya sabes en qué te puede ayudar.