Con la anoréxica muñeca de Mattel presente en todo el mundo por estos días debido al estreno de su película, hay quienes en el Perú no quisieron desaprovechar esa oportunidad y utilizarla como una forma de atacar a la Presidenta constitucional Dina Boluarte, pero lo que no calcularon es que su creación se volvió rápidamente contra ellos y se convirtió en el recuerdo permanente de la contundente derrota de su pomposamente denominada “Tercera Toma de Lima” (?) como si hubiera habido dos anteriores, organizada por Sendero Luminoso, y para desconsuelo de los caviares fue un fracaso total. Como sabéis, esos parásitos “izquierdistas” acostumbrados a vivir a costa del Estado para vivir como los ricos a los que tanto odian y que fueron expectorados del Poder junto con el delincuente terrorista Pedro Castillo, el pasado 7 de diciembre cuando este oscuro individuo de limitado lenguaje y nula inteligencia dio un autogolpe de Estado, que fracaso desde el primer momento y terminó no solo con el golpista en la cárcel ese mismo día, sino con la buena vida que se daban los caviares desde la época de Paniagua, quienes quedaron desamparados de un momento a otro. Desesperadas esas garrapatas malnacidas al quedarse literalmente en la calle, no dudaron en organizar una serie de asonadas terroristas en el país andino, junto con sus ‘socios’ de Sendero Luminoso con el claro objetivo de provocar la caída del nuevo gobierno y volver a encaramarse al Estado para seguir disponiendo alegremente de sus recursos a lo cual ya se habían malacostumbrado, pero fracasaron miserablemente una y otra vez. Ahora bien, muchos se preguntaran ¿Y qué tiene que ver la muñeca de Barbie con todo ello? Sucede que coincidentemente, mientras todo el mundo hablaba de esa mediocre película - el poder de la propaganda dicen - la Presidenta Boluarte se presentaba en un acto oficial en Palacio de Gobierno vistiendo íntegramente de rosado. Ello bastó para que sus enemigos quisieran asociarla a la muñeca - por lo vana y superficial, además de ajena a los problemas mundanos - mostrándola al interior de su caja, bautizándola como Dina - Barbie. La idea prendió rápidamente y así fue presentada en la raleada marcha terrorista del pasado 19 de julio, acompañada de frases injuriosas, pero de nada les valió. El fracaso de la asonada terrorista fue inobjetable y es algo que no pudieron negar sus organizadores, quienes se acusaron mutuamente de la debacle. De esta manera y para dolor y vergüenza suya, Dina - Barbie les recordara para siempre como un fierro candente en la piel, que ese día no pudieron desestabilizar al país como esperaban e instaurar su demencial ‘república popular de nueva democracia’…. Ni ahora, ni nunca. Que tengan muchas pesadillas con ella.
