TIEMPOS DEL MUNDO
martes, 24 de octubre de 2023
MENSAJEROS DEL ENGAÑO: Demonios alienígenas y el Apocalipsis
Como sabéis, tanto en el Perú como en el resto del mundo, existen una serie de mitos y leyendas acerca de la llegada a nuestro planeta en tiempos inmemoriales de ‘seres celestiales’ provenientes de lejanos mundos mas allá de las estrellas- llamados ‘dioses’ - a impartir sus conocimientos a los hombres y que luego, una vez cumplida su misión, regresan por donde vinieron. (Viracocha, Naylamp, y Ai Apaec podrían ser claros ejemplos de ello) ¿Pero si en lugar de ‘dioses’, no serian en realidad demonios que buscan nuestra perdición? Al respecto, los eventos que rodean el fin de los tiempos, tal como se describen en la Biblia, incluirán una gran decepción (Mateo 24:24). Últimamente ha aumentado el interés por una teoría de que este engaño incluirá a seres extraterrestres. Por extraño que parezca, esta teoría es totalmente factible desde una perspectiva cristiana. Aunque la Biblia no nos dice nada sobre la existencia o no de los extraterrestres -no los incluye en el relato de la creación en el Génesis, ni los menciona en ninguna otra parte-, sí nos habla de visitantes de otro mundo: el mundo espiritual: los llamados ‘ángeles’. Desde el principio de los tiempos, se han registrado y presenciado visitas de demonios (ángeles caídos) a la Tierra. Del encuentro de Eva con Satanás sabemos que los demonios están interesados en vigilar (y alterar) el progreso de la humanidad. Quieren estar involucrados, con el propósito de hacer que la humanidad no adore a Dios, sino a ellos mismos. Otro claro ejemplo de su interacción con nosotros se encuentra en Génesis 6:4 con la llegada de los "hijos de Dios". El relato del Génesis afirma que estos poderosos seres tuvieron relaciones sexuales con mujeres y produjeron una super raza de seres conocidos como los Nefilim. Esto puede sonar a ciencia ficción, pero aparece en la Biblia. Hay semejanzas sorprendentes entre este relato y los relatos de otras culturas antiguas. Por ejemplo, los escritos de los antiguos sumerios (que fueron los primeros en producir un lenguaje escrito) mencionan la presencia de los "Anunnaki", que eran deidades que vinieron del cielo para habitar en la tierra con los hombres. También es interesante destacar que los dioses sumerios con frecuencia venían a ellos en forma de serpientes. Estos relatos, junto con las cosas asombrosas creadas por el hombre antiguo, permiten teorizar que los demonios, en forma de seres de otro mundo, vinieron a la tierra, trayendo sabiduría y conocimientos espectaculares a los hombres, y "casándose" con sus hijas en un intento de alejar a los hombres de Dios. De la experiencia de Eva con la serpiente ya vemos que los demonios utilizarán la tentación de la sabiduría superior para atrapar al hombre y comprobarán que el hombre es muy susceptible a ella. ¿Podría el final de los tiempos incluir un engaño alienígena similar? La Biblia no aborda este asunto directamente, pero sin duda es bastante creíble por varias razones. En primer lugar, la Biblia nos dice que el mundo se unirá bajo el poder del Anticristo. Para lograr un acuerdo entre todas las religiones del mundo, tendría sentido que ese "unificador" viniera de un lugar totalmente nuevo: una fuente extraterrestre. Es difícil imaginar que una religión se convierta en cabeza de todas las demás, a menos que un nuevo conocimiento sobrenatural fuera la fuente del atractivo y el poder de la nueva "religión". Esto estaría en línea con los engaños del pasado y sería una forma muy eficaz de engañar a un gran número de personas. En segundo lugar, este engaño podría dar una respuesta al problema de los orígenes de la tierra. La teoría científica de que la evolución de la vida en la tierra se generó espontáneamente aún no tiene respuesta para los inicios de la vida. Hay pruebas de un "big bang", pero eso sigue sin explicar qué causó que ello se produjera. Si llegaran seres alienigenas y nos dieran una explicación extraterrestre para la vida en la Tierra, los orígenes de las religiones del mundo e incluso los orígenes de nuestro planeta, sería muy convincente. Ahora bien, no debemos temer. El Señor ha dicho que no nos dejará ni nos abandonará, y que nos protegerá (1 Reyes 8:57; Mateo 10:31; Isaías 41:10). Los demonios/ángeles no son omnipotentes, ni omnipresentes. Jesús dijo que en los últimos tiempos Su aparición sería como el relámpago, fácilmente visible para todos. Dijo que desconfiáramos de cualquier ser que dijera "Yo soy el Cristo" o de cualquier grupo que dijera "Él está allá" o "Él está aquí dentro" (Mateo 24:23-24). Él dijo que los buitres se reúnen alrededor de un cadáver, lo que significa que si ves a un grupo de personas que se reúnen alrededor de alguien que dice ser Cristo, esa persona es la muerte y un falso profeta. Debemos desconfiar de cualquier persona o ser que haga señales y maravillas que no tengan base bíblica o que no obedezcan a Jesús, así como de cualquiera que ofrezca una forma de unir a las religiones o gobiernos del mundo (Apocalipsis 13:5-8), de cualquier ser que promueva relaciones sexuales antinaturales (Génesis 6:4; Judas 1:6-7) y, obviamente, de cualquier persona que niegue que Jesús es Dios (2 Juan 1:7). Además, cualquiera que presente a un Jesús "sustituto", que lo represente como "un dios pero no el Dios" o que afirme que fue simplemente un buen maestro, simplemente un humano, o incluso una criatura sobrehumana o extraterrestre, es un engañador. Por último, si los demonios que se manifiestan como extraterrestres son parte del final de los tiempos, debemos recordar que ellos también son seres creados sujetos a un Dios soberano y en última instancia responsables ante Él. Ya sea en forma alienígena o no, las descripciones de los demonios en Apocalipsis son aterradoras (Apocalipsis 9:1-12), pero no debemos temer a aquellos que pueden matar el cuerpo, sino sólo a Aquel que puede matar el cuerpo y el alma en el infierno (Mateo 10:28). No importa lo que nos suceda en la tierra, debemos confiar en que el Señor es el Salvador, Redentor y Protector de las almas de aquellos que ponen su confianza en Él (Salmo 9:10; 22:5). No debemos por ello dejarnos confundir por el Maligno, que se presentará de mil maneras para provocar nuestra ruina, sea como ‘un ángel de luz’ o ‘un ser celestial’. Los OVNIS por cierto ¿no serán el último gran engaño que prepara para la humanidad? ¿Acaso un engaño alienígena podría ser parte del fin de los tiempos?