Numerosos testimonios recolectados a través de los años dan cuenta de la existencia de unos extraños seres que aterrorizan a quienes se encuentran con el en su camino. Se trata del Ucu - también llamado Ukuku - un criatura mitológica humanoide de grandes proporciones y cubierto de pelos del cual se dice que habita en los inaccesibles montañas de la Cordillera de los Andes - ubicadas tanto en el sur de Perú, Chile, Bolivia y el norte argentino (donde es llamado Ucumar) – que aterroriza a los pobladores de la región para luego perderse en cuevas alejadas Quienes lo han visto dicen que es de gran tamaño y siempre camina erguido. A diferencia de su “primo” el Yeti, prefiere las regiones más inhóspitas de los Andes en lugar de picos cubiertos de nieve del Himalaya. Vive en cuevas, en el fondo de las quebradas, pero merodea los ríos y vertientes, bañándose en ellos: es fácil por eso encontrar allí sus pisadas, similares a las de un oso. Según algunas versiones, además de fuerte es ágil, y puede treparse a los árboles más altos. Según se afirma, el nombre Ucu está relacionado al sonido que suele hacer cuando deambula oculto por la vegetación, un grito ululante Uhú, o Ughuú.Los encuentros con estas extrañas criaturas nunca han sido agradables.Al respecto, un caso se publicó en el diario Arequipa Al Día, que en su edición del 29 de octubre del 2003 publicó la experiencia sufrida por un joven andinista - que afirma que se quedo paralizado por el miedo al toparse con el - quién relató haber visto en una de sus ascensiones al volcán Misti, de una criatura de facciones humanas (pero con excesivo pelo amarillento en todo el cuerpo, ya que llevaba ningún tipo de vestimenta), cruzar cercano a su campamento nocturno con gestos amenazantes y cuyas huellas se hicieron patentes por la madrugada. Otro testigo narra su experiencia de la siguiente manera: “Es fornido y no corre mucho, pero es muy forzudo. Si bien no se me ha acercado nunca, los he visto de lejos atrapando gente. Cuando un Ucu atrapa a uno, lo mejor es orinarse, porque entonces suelta a su presa. Es grande, con el pelo como el de un perro lanudo, y siempre camina sobre sus patas de atrás, como la gente".afirma.Venga ya, las historias nos suenan muy similares a la de los encuentros con los Yetis, lo que nos hace pensar que bien podría haber una población de desconocidos bípedos peludos todavía con vida en el mundo de hoy o que en realidad - que es lo mas probable - se trate de osos de anteojos que habitan en los Andes y que tienen las mismas características que el imaginario Ucu, que precisamente en lengua indígena significa oso. Mucha coincidencia ¿no os parece? 
martes, 12 de marzo de 2013
EL UCU: El Yeti de los Andes
Numerosos testimonios recolectados a través de los años dan cuenta de la existencia de unos extraños seres que aterrorizan a quienes se encuentran con el en su camino. Se trata del Ucu - también llamado Ukuku - un criatura mitológica humanoide de grandes proporciones y cubierto de pelos del cual se dice que habita en los inaccesibles montañas de la Cordillera de los Andes - ubicadas tanto en el sur de Perú, Chile, Bolivia y el norte argentino (donde es llamado Ucumar) – que aterroriza a los pobladores de la región para luego perderse en cuevas alejadas Quienes lo han visto dicen que es de gran tamaño y siempre camina erguido. A diferencia de su “primo” el Yeti, prefiere las regiones más inhóspitas de los Andes en lugar de picos cubiertos de nieve del Himalaya. Vive en cuevas, en el fondo de las quebradas, pero merodea los ríos y vertientes, bañándose en ellos: es fácil por eso encontrar allí sus pisadas, similares a las de un oso. Según algunas versiones, además de fuerte es ágil, y puede treparse a los árboles más altos. Según se afirma, el nombre Ucu está relacionado al sonido que suele hacer cuando deambula oculto por la vegetación, un grito ululante Uhú, o Ughuú.Los encuentros con estas extrañas criaturas nunca han sido agradables.Al respecto, un caso se publicó en el diario Arequipa Al Día, que en su edición del 29 de octubre del 2003 publicó la experiencia sufrida por un joven andinista - que afirma que se quedo paralizado por el miedo al toparse con el - quién relató haber visto en una de sus ascensiones al volcán Misti, de una criatura de facciones humanas (pero con excesivo pelo amarillento en todo el cuerpo, ya que llevaba ningún tipo de vestimenta), cruzar cercano a su campamento nocturno con gestos amenazantes y cuyas huellas se hicieron patentes por la madrugada. Otro testigo narra su experiencia de la siguiente manera: “Es fornido y no corre mucho, pero es muy forzudo. Si bien no se me ha acercado nunca, los he visto de lejos atrapando gente. Cuando un Ucu atrapa a uno, lo mejor es orinarse, porque entonces suelta a su presa. Es grande, con el pelo como el de un perro lanudo, y siempre camina sobre sus patas de atrás, como la gente".afirma.Venga ya, las historias nos suenan muy similares a la de los encuentros con los Yetis, lo que nos hace pensar que bien podría haber una población de desconocidos bípedos peludos todavía con vida en el mundo de hoy o que en realidad - que es lo mas probable - se trate de osos de anteojos que habitan en los Andes y que tienen las mismas características que el imaginario Ucu, que precisamente en lengua indígena significa oso. Mucha coincidencia ¿no os parece? 